Personajes

Escena primera. Presentación

(Introducción musical País de los Cachivaches.)

NARRADORA.- En el lejano país de Cachivachilandia ,que está más cerca de todos nosotros y nosotras de lo que podemos imaginar, vivía Cleta. Aquél era un día muy especial para los pequeños cachivaches …

(Escena de Cleta en su cama .Cleta se despierta y bosteza.)

NICANOR.- ¡Rinnnggg! ¡Rinnnggg! Es la hora de levantarse, ¡Vamos! ¡Despierta dormilona!

CLETA.- Ya estoy despierta.

NICANOR.- ¡Eso no puede ser!, ¡así no! Tienes que esperar a que suene yo, los despertadores servimos para despertar a nuestros usuarios recordándoles con un fuerte sonido que deben levantarse… (Cleta vuelve a dormirse.)

NICANOR.- ¡No!, ¡no te duermas! ¡Qué desilusión! Ahora resulta que te duermo en vez de despertarte.

Los despertadores servimos para despertar, no para dormir a nuestros usuarios.

¡Ahora verás!¡ Ringgg!

CLETA.- ¡Ay! ¡Vale! ¡Vale Nicanor! No seas latoso. ¡Silencio!

(Apaga el despertador. Nicanor queda mudo y se va enfadado. Cleta vuelve a dormir.)

CLETA .- (Está durmiendo.)

PADRE.- (En off.) Cleta, hija mia, tienes el desayuno en la mesa.

CLETA.- (Despertandose.) ¡Ah!

PADRE.- Date prisa, se te va a quedar frío. Bueno, que te vaya muy bien en tu primer día de clase

CLETA.- ¡Ah!

PADRE.- Tu madre y yo nos vamos, un beso.

Escena segunda. Camino de la escuela

( Aparece el bosque de Las Piruletas y la Tetera Montaña.)

NARRADORA.- Aquel precioso día en el bosque de las piruletas brillaba el Sol Bombilla.

(Aparece la Luna Zapatilla.)

TITIRITERA.- (En off.) La Luna Zapatilla no, sólo el Sol Bombilla.

TITIRITERO.- Sí, sí, perdona.

(Aparece Lázaro el Pájaro revoloteando.)

CLETA .- ¡Oh, un pájaro! ¡Un pájaro natural de la naturaleza! ¡Voy a cogerle!

(Cleta persigue al pájaro que se desplaza de un lado a otro.)

CLETA.- ¡Qué pájaro tan bonito! ¡Ven aquí pajarito! ¡¡No tengas miedo ! ¡No te haré daño! ¡No te asustes!

(Cansada de dar vueltas, se para) ¡Agg! ¡Agg! ¡Agg!

(El pájaro se posa encima de ella y cuando intenta cogerle se marcha.) ¡Eh, no te vayas! ¡Vuelve!

PILLO.- ¡Uy! ¡Qué chica más fea va hacia el colegio!

(Acercándose a Cleta.) ¡ Eh, vaya una nariz más larga que tienes !

CLETA.- ¿Yo ,nariz larga? ¡Pues anda que tú!

(Dan una vuelta mirándose de frente en actitud de reto.)

¡Seguro que no te has mirado al espejo! ¡Además ! ¿tú quién eres?

PILLO.- Soy Pillo, el martillo y no me gustan las niñas cursis .

CLETA.- Pues yo no soy una niña cursi, ¡para que te enteres!

PILLO.- ¡Ah! ¿sí?, entonces ayúdame a ponerle un petardo a la profesora .

CLETA.- ¿Un petardo? Pero se asustará mucho y podemos hacerle daño…

¡Mira que eres bruto! ¡Anda, aparta!

PILLO.- ¡Bah! Eres una cobarde. ¡Adiós cursilona!

(Canción de Pillo. Aparece Bartolo, el Ratón y canta con él.)

Pillo, el Martillo, ese soy yo .

Me gusta machacar y también golpear,

me gusta abollar y las cosas doblar.

Pillo, el Martillo, ese soy yo (Bis)

Vivo en una alcantarilla y me gusta romper bombillas.

Duermo en un contenedor, me gusta causar temor

Pillo, el Martillo, ese soy yo (Bis)

(Se van cantando los dos . Aparece Cleta)

CLETA.- Creo que me he perdido. ¡Vaya, he vuelto al mismo sitio! ¿Por dónde se irá al colegio?

GUSTAVO.- (Asomándose desde abajo, muy tímido, sale por fases, primero la cabeza, después hasta la altura de los ojos.) ¡eh! ¿se ha ido ya Pillo?

CLETA.- (Acercándose.) Sí, se ha ido, ¿tú quién eres?

GUSTAVO.- (Termina de salir.) Soy Gustavo. ¿Podemos ir juntos al colegio? Es que no quiero ir solo porque Pillo me da mucho miedo.

CLETA.- ¿Y por qué te da miedo?

GUSTAVO.- Es que la tiene tomada conmigo y no sé porqué.

CLETA.- ¡Vaya! Oye, Gustavo, ¿tú conoces el camino para llegar a la escuela?

GUSTAVO. - ¡Sí, claro! ¡Yo te guiaré!

(Se choca varias veces, primero con el bosque, después con Cleta.) Sigueme.

( Cleta hace un gesto de paciencia y le sigue.) Vamos es por aquí.

(Tema musical para cambio de decorado.)

Escena tercera. La escuela

(Decorado escuela.)

PILLO.- ¡Ven aquí!

GUSTAVO.- ¡Déjame en paz!

AMEDIA.- ¡Silencio! (Barullo de los alumnos.) ¡Silencio! ¡Buenos días queridos cachivaches! Soy Amedia vuestra profesora, conmigo aprenderéis un montón de cosas y os vais a portar todas y todos fenomenal, ¿Verdad preciosos?

PILLO.- (Se asoma por la estanteria.) Precioso el petardo que le voy a poner, jua, jua.

AMEDIA.- ¿Qué dices, guapo?

PILLO.- Nada, nada, profe, que tengo muchas ganas de aprender.

AMEDIA.- Así me gusta, encanto. Ahora que estamos todos y todas y como hoy es vuestro primer día de colegio, lo primero que haremos es presentarnos y decir para qué servimos ¿Vale?. Empezaré yo y después seguiréis vosotras y vosotros ¿Vale?

PILLO.- Vale.

AMEDIA.- Muy bien, pues yo soy Amedia la enciclopedia y sirvo para enseñar, enseño geografía, matemáticas, lengua, literatura y conocimiento del miedo, digo del medio y otro montón de cosas más que guardo entre mis páginas como un tesoro…

PILLO.-¡Vaya rollo de profe! (Se va.)

AMEDIA.- ¿Qué has dicho cachivachurrín?

PILLO.- Pues que, ¡vaya un chollo de profe!

AMEDIA.- ¡Ah! Muy bien. Y ahora vosotros dos, salid aquí y presentaros ante todos

(Se va y salen Romero, el lapicero y Julieta, la libreta.)

JULIETA.- Yo soy Julieta, la libreta.

ROMEO.-Y yo Romero, el lapicero.¡ Ay! (Suspiran los dos mirándose.)

AMEDIA.- ¡Vamos! Ahora tenéis que decir para qué servís.

JULIETA.- Yo sirvo para ser escrita por ejemplo… por Romero, el Lapicero, ¡Ay! ¡Qué madera! (Se va mirando a Romero.)

ROMEO.- Yo sirvo para escribir en, en…por ejemplo, Julieta, la libreta ¡Ay! ¡Qué guapa es! ¡Qué espiral! (Se va.)

PILLO.- ¡Están enamorados, son novios! (Se ríen todos.)

AMEDIA.- Orden, orden en la clase. Ya os podéis sentar, que salgan el siguiente.

RENATA.- Verá usted, señorita Amedia, yo soy ni más ni menos que Renata la lata,

como podéis apreciar, muy guapa y distinguida. Mi padre es Antón el latón de la familia de los latosos y mi abuelo era el conde de la lata, que fue condecorado con la medalla al mérito latuno. Toda mi distinguida familia se ha dedicado siempre a las conservas, desde que mi bisabuela la señorita de Latonia…

PILLO.- ¡Qué lata tan latosa! ¡Cállate ya!

RENATA .- ¡Oig! ¡Qué tipo tan vulgar! Se lo voy a decir a mi padre, que es el dueño de la fábrica de conservas para que mande a sus empleados los botes a darte la lata.

PILLO.- ¡Uy! ¡Qué miedo me da! Ya verás como te abolle cursi.

RENATA.- ¡Señorita Amedia, Señorita Amedia! ¡Me ha llamado cursi y eso es increíble!

AMEDIA.- ¡Basta ya! Que salgan los siguientes.

PILLO.- Soy Pillo, el martillo y sirvo para aporrear, golpear, machacar y sobre todo lo que más me gusta es clavar clavos.

AMEDIA.- Muy bien, ahora tú, amigo. ¡Vamos! ¡A qué esperas!

GUSTAVO.- Pues yo me llamo Gustavo y sirvo para… para…

AMEDIA.- ¡Vamos! Dinos de una vez para qué sirves.

GUSTAVO.- Soy un clavo y sirvo para ser clavado.

VOZ EN OFF.- ¡Señorita Amedia, señorita Amedia, preséntese en secretaría inmediatamente!

AMEDIA.- Enseguida vuelvo cachivachurris. ¡Portaros bien!

PILLO.- Jua, jua, lo que me voy a divertir este curso. ¡Vas a ver cuando te pille flacucho!

GUSTAVO.- ¡Socorro! (Sale corriendo y se inicia una escena de persecución, saliendo del teatrillo hasta que por equivocación Pillo pega a la Titiritera en la cabeza, después vuelven al teatrillo.)

TITIRITERA.- (Dirigiéndose al titiritero.) ¡Ten más cuidado!

TITIRITERO.- ¡Perdona, lo siento!

PILLO.- ¡Vamos,titiritero! (Salen, dan otra vuelta, entran al teatrillo y se esconde Gustavo.)

PILLO.- Ven Gustavito, que te voy a dar un besito. (Aparece la Señorita Amedia.)

AMEDIA.- ¡Ya estoy aquí cachivachurris! ¡Pillo deja de enredar y vete a tu sitio! Pongamos un poco de cordura en esta clase. Que salga el siguiente. ¡Qué día tan agobiante! (Sale de escena.)

CHALUPA.- ¡Hola! Soy Chalupa la lupa y vivo en una casa okupa.

AMEDIA.- Bien, pero dinos para qué sirves.

CHALUPA.- Servir o no servir esa es la cuestión, pero para mi es mejor comer turrón

dentro de un camión.

AMEDIA.- Veamos, además de comer turrón, ¡Para qué sirves!

Chalupa.- Yo creo que en el fondo nadie sabe muy bien para qué sirve, unos te utilizan para una cosa y otros para otra, porque nada es verdad ni es mentira, todo depende, todo depende del cristal con que se mira.

AMEDIA.- ¡Ay! ¡Qué desesperación! Anda, siéntate ya, guapa. ¿Quién falta ?

CLETA.- Yo, señorita.

AMEDIA.- Pues sal. ¡A que esperas!

CLETA.- Yo soy Cleta y sirvo para, para, para…

AMEDIA.- ¡Vamos! ¡Vamos! ¿Para qué sirves?

CLETA.- Pues, esto, yo sirvo para…para…¡No lo sé! (Todos se ríen de ella.)

AMEDIA.- ¡Muy mal, Cleta!

PILLO.- ¡Cleta es tonta! ¡No sabe para qué sirve! (Todos se ríen.)

AMEDIA.- ¡Basta cachivaches! Cleta, tus deberes para mañana consistirán en averiguar para qué sirves. (Toca la campana de salida.)

Cachivachurris, la clase ha terminado. (Se oyen los gritos de salida.)

¡Ay! ¡Qué paz! ¡Qué tranquilidad! ¡Qué sosiego! ¡Qué relax! (Explota un petardo.)

¡Ay! (La señorita Amedia huye asustada. Aparece por un lateral Pillo riéndose.)

(Tema musical para cambio de decorado.)

Escena cuarta. El bosque.

(Decorado del bosque de las Piruletas.)

CLETA.- ¡Ay! ¡Qué mala pata! Todos mis compas del cole se han reído de mí y todo porque no sé para qué sirvo. ¿Para qué porras serviré yo?

GUSTAVO.- (Aparece corriendo y mirando hacia atrás.) ¡Socorro! ¡Auxilio!

CLETA.- ¿Qué te pasa, Gustavo?

GUSTAVO.- Me persigue Pillo, ¡quiere hacerme picadillo!. Me voy pitando. Si le ves dile que me fui a un país lejano.

CLETA.- ¿A qué país?

GUSTAVO.- Al primero que se te ocurra.

PILLO.- Jua, jua, mira quién está aquí, la más ignorante del colegio, ni siquiera sabe para qué sirve.

CLETA.- Pues lo estoy pensando. ¿O es que todos los cachivaches tienen que nacer sabiendo para lo que sirven?

PILLO.- Todos menos tú, jua, jua. Por cierto, ¿has visto por aquí a ese flacucho de Gustavo?

CLETA.- ¡Sí! Digo, ¡no!

PILLO.- ¡Qué pasa! ¿Tampoco sabes si ves a la gente o no la ves? ¡El colmo de la ignorancia!

CLETA.- Sí que lo sé, le he visto y se ha ido al país que primero se te ocurra o algo así, para que veas que controlo.

PILLO.- Me tomas el pelo o qué. Creo que eres el cachivache más inútil que he visto en todo cachivachilandia. ¡Ahí te quedas, bobalicona! Jua, jua, jua (Se va.)

CLETA.- ¡Ay! ¡Qué rabia me da! ¿De verdad seré la más inútil de todos los cachivaches? A lo mejor es verdad y no sirvo para nada.

CHALUPA.- (Aparece de repente desde abajo.) ¡Hola, Cleta! ¿Quieres hacer una pirueta?

CLETA.- ¡Ay! ¿Cómo?

CHALUPA.- Como, como, Comodoro. Rasca, rasca, su candil. Para encontrar la manera de salirse del redil.

CLETA.- ¿qué quiere decir eso?

CHALUPA.- No lo sé, pero ¿a que mola?

CLETA.- Sí, está bien. Oye Chalupa, ¿tú sabes para qué sirves?

CHALUPA.- Te contaré el secreto. A mi me utilizan para mirar las cosas, convierto lo pequeño en grande, lo grande en grandote y lo grandote en… se sale

CLETA.- ¿Y por qué no quieres que lo sepan? No entiendo ni patata.

CHALUPA.- Ni patatín ni patatán, los que se van ya volverán, canta conmigo Cleta.

CLETA.- No, déjalo, me voy porque tengo un poco de mareo.(Se va.)

CHALUPA.- Contra el mareo puedes jugar al veo veo o salir a dar un paseo en el recreo.

(Se va.)

ROMEO.- Por ahí viene Julieta ¡Ay!

JULIETA.- Hola, Romero.

ROMEO.- Hola Julieta, ¿Sabes? A mí me gustaría…me gustaría …

JULIETA.- ¿Escribir en mí?

ROMEO.- ¡Sí! ¡Eso! Pero es que ..es que…

JULIETA..- ¡Ya sé! No sabes escribir.

ROMEO.- ¡Eso!

JULIETA.- No te preocupes, ya aprenderás…(Se cogen de la mano y se van.)

Escena quinta. El abuelo Nabuco.

(Tema musical del abuelo Nabuco, el trabuco.)

(Aparece el Abuelo en su sillón, durmiendo y murmurando incoherencias.)

NABUCO.- Sí, mi general. A la orden mi general. ¡Al ataque soldados! ¡Que avance la retaguardia! ¡Vamos cabo! ¡Deje de atusarse los bigotes! ¡Preparados! ¡Apunten! ¡Fuego! Pin, pan, pun.

CLETA.- (Zarandeándole ligeramente.) ¡Abuelo! ¡Despierta! Tienes pesadillas.

NABUCO.- ¿Qué pasa? ¿Hemos perdido la batalla?

CLETA.- No, abuelo. La guerra terminó hace mucho tiempo.

NABUCO.- ¡Ah! ¿Sí? Pues qué faena. Aquellos sí que eran buenos tiempos. Cuando disparábamos contra los malvados enemigos. (Tose varias veces.) Ehem…ehem…(Cleta le da en la espalda.)

CLETA.- Abuelo, ¿Tú conocías a los enemigos?

NABUCO.- ¡Qué pregunta tan tonta, recluta! ¡A los enemigos no se les puede conocer!

CLETA.- ¿Entonces cómo sabías que eran malvados?

NABUCO.- ¡Soldado, basta ya de preguntas sin importancia! ¡Ehem, ehem, ehem!

CLETA.- Abuelo, quiero hacerte una pregunta muy importante.

NABUCO.- ¡Ah! Pues entonces debo consultar el código militar y el libro gordo del cadete, por cierto ¿dónde están mis gafas?

CLETA.- Las llevas puestas, abuelo. Pero déjame que te haga la pregunta.

NABUCO.- Bueno, pues pregunte usted, recluta.

CLETA.- Es que verás, yo ignoro para qué sirvo y me gustaría que tú me lo dijeras.

NABUCO.- Fácil respuesta, recluta, en esta familia servimos para disparar, tu misión consistirá en disparar a los pájaros.

CLETA.- ¿Disparar?,¡ qué horror!, ¡ yo no quiero hacer eso, abuelo!

NABUCO.- ¿Cómo que no, jovencita? Tú aniquilarás como la primera . Tienes que disparar para ser un cachivache de provecho. ¡Estaría bonito! Eres Cleta la escopeta y debes hacer honor a tu nombre. Tu abuela Josefina ,la carabina, nunca falló un tiro en su vida.y mi padre Melitón, el cañón, participó en gloriosas batallas. Ehem…Ehem…Ehem…(Tose y Cleta le da en la espalda.)

CLETA.- Pero abuelo, a mí me gustan mucho los pájaros y ¡no puedo, no puedo y no puedo!

NABUCO.- Pero, ¡qué cachivache tan impertinente! Está en juego nuestro orgullo, nuestro prestigio ¿Qué dirá la gente si te ven por ahí sin aniquilar pájaros como es tu obligación? Recuerdo aquellos tiempos en que disparábamos sin parar, cuando acompañé a Mambrú a la guerra…por cierto, ¿qué sería de aquel hombre? No le volví a ver…

(Se queda dormido mientras balbucea algunas frases.)

Nos atacan, adelante mis valientes.

(Tema musical de Nabuco,el trabuco para cambio de escenografía)

Escena séxta .La Escuela II.

(Decorado de la escuela.)

AMEDIA.- ¡Orden, orden! ¡silencio, queridos cachivaches! Cleta, explícanos a todos para qué sirves. Espero que te hayas aprendido bien la lección.

CLETA.- Pues…pues…

AMEDIA.- Pues, ¡Qué!

CLETA.- Pues…¡que ya he descubierto para lo que sirvo!

AMEDIA.- Entonces, dilo de una vez.

CLETA.- Pues soy Cleta… ¡la pandereta!, un instrumento musical muy alegre y …

PILLO.- ¿Y dónde tienes los platillos? ¡Es imposible! ¡Buuu!

AMEDIA.- Pillo vete a tu sitio.

CLETA.- Es que me he confundido, en realidad soy Cleta…¡La maleta! y me gusta mucho viajar…

PILLO.- Las maletas no tienen esa narizota, ¡tonta!

AMEDIA.- ¡Siéntate de una vez, Pillo! Se me está acabando la paciencia, Cleta ¿lo sabes o no lo sabes?

CLETA.- Bueno, la verdad es que soy Cleta, la escopeta (Lo dice muy bajito)

AMEDIA.- ¿Qué dices?

CLETA.- La escopeta.

AMEDIA.- ¡Cleta habla más alto! (Exasperada)

CLETA.- (Gritando.) ¡Soy Cleta, la escopeta y sirvo para disparar y aniquilar a los pájaros!

AMEDIA.- (En off.) ¡Uf! Muy bien, ¿Ves, como no era tan difícil? Ya puedes tomar asiento,

pero, ¡no pongas esa cara!

PILLO.- ¡Cómo mola!, yo también quiero aniquilar.

AMEDIA.- ¡Silencio, Pillo y vete a tu sitio! Ahora saldrá Renata a decir su lección de historia.

RENATA.- Gracias, queridísima señorita Amedia. Por cierto, quería decirle que sus pastas tienen un color precioso.

PILLO.- ¡Buuu…pelota! ¡Quieto Bartolo! cuando termine la clase sales.

RENATA.- En tiempos de Marilatas, había dos poblados latunos que se convirtieron en piratas como tres menos dos es uno y bla, bla, bla…porque bla, bla, bla…

PILLO.- ¡Fuera! ¡Bocazas!

RENATA.- ¡Señorita Amedia, Señorita Amedia! ¡Me ha llamado bocazas y eso no puedo soportarlo! ¡Además es increíble !Yo, una lata tan bien proporcionada, a quién se le ocurre…

AMEDIA.- ¡Silencio, Renata! te pondré un sobresaliente por tus méritos latosos. (Suena la campana.)

¡La clase ha terminado! (Se oye alboroto.)

Por fin sola, ¡qué paz!, ¡qué tranquilidad!, ¡qué sosiego!, ¡qué relax!

(Aparece Bartolo, el ratón .)

¡Ay! ¡Socorro! ¡Que alguien me ayude! (Sale corriendo, aparece Pillo riéndose.)

Escena séptima. La gamberrada de Pillo.

(Decorado bosque.)

(Aparece Cleta cabizbaja, se le acerca Lázaro el pájaro y ella le acaricia.)

CLETA.- Yo nunca te haré daño, Lázaro. (Aparece Pillo, Lázaro se va asustado.)

PILLO.- ¡Eh! ¡Cleta! ¿De verdad sirves para aniquilar? ¡Vamos! ¡Dispara a ese pájaro!

CLETA.- No puedo, no me gusta disparar.

PILLO.- ¿Cómo no te va a gustar, si está cañón? Oye colegui ¿por qué no aniquilamos tu y yo juntos?

CLETA.- ¡Te he dicho que no y que no! (Se va.)

PILLO.- Venga, no seas cursi, seguro que cuando empieces te mola. ¡Bah! ¡Vaya tonta! (Aparece Gustavo por un lateral y Pillo se esconde.)

GUSTAVO.- (Aparece cantando.) Babadú, babadá, dubidú, dubidá. (Se choca con Pillo.)

¡Huy! ¡Perdón, señora no la había visto!

PILLO.- ¡Hola ,Gustavito!, ¡qué ganas tenía de verte! (Le persigue hasta que consigue golpearle.) ¡Toma! ¡Toma! Y ¡Toma! ¡Por fin te he machacado! ¡Adiós bobo! Jua, jua. (Se va.)

GUSTAVO.- (Aparecen chichones en su cabeza.) ¡Ay! ¡Qué dolor de cabeza! ¡Socorro!

(Aparece Chalupa ,la lupa).

CHALUPA.- Tranquilo, Gustavo. Yo te ayudaré a salir de ahí. ¡Oye Gustavo! ¿Por qué no nos vamos de fiesta?

GUSTAVO.- ¡Nooo! ¡Ay! Me encuentro fatal.

CLETA.- ¡Bueno, pues entonces te llevaré a urgencias cachivachiles.

GUSTAVO.- ¡Síiii !¡Ay! ¡Veo estrellas y pajaritos!

CHALUPA.- ¡Ah! ¿Sí? ¡Cómo mola! (Se van.)

Escena octava. La pesadilla de Cleta.

(Cleta y Nicanor están durmiendo.)

CLETA.- (Se despierta con un grito.)¡Aaah!

NICANOR.- ¡Qué forma de despertarle a uno! Además soy yo el que debe despertarte a ti y no tú a mí. Los despertadores servimos para despertar y no para ser despertados. ¡Hasta ahí podríamos llegar!

CLETA.- ¡Silencio, Nicanor! (Cleta le desconecta y se va mudo.)

(Canción de Cleta.)

No puedo hacer lo que me piden,

no quiero hacer lo que debo hacer.

No quiero hacer lo que me dicen,

quiero saber lo que quiero ser.

Quiero saber quién soy.

Quiero saberlo hoy, porque seré lo que yo quiera ser.

(Cleta se vuelve a dormir)

NARRADORA.- Cleta soñó aquella noche con lo que quería ser. Sueña, Cleta, sueña. Pasó el tiempo en el país de Cachivachilandia, ése que está más cerca de todas nosotras y nosotros de lo que podemos imaginar. Pero, ¿qué fue de los pequeños cachivaches?

Escena novena. La decisión de Cleta

NARRADORA.- Pues veréis, Chalupa, la lupa, se doctoró en filosofía existencial por la Universidad Cachivachónoma y se dedicó a dar conferencias en las que todos la escuchaban con gran interés, aunque no entendían ni patata. (Aparece Chalupa.)

CHALUPA.- Veamos, ¿por qué las alpargatas baratas sólo pueden comer bocatas?, ¿eh?, ¿lo habéis pensado alguna vez? (Se va.)

NARRADORA.- Romero, el lapicero y Julieta, la libreta, siguieron profundizando en su amistad.

Renata, la lata, por fin encontró un amigo que soportara sus peroratas. (Aparecen Renata y Gustavo.)

NARRADORA.- Pillo ,el martillo ,se dedicó a gamberrear de lo lindo, hasta que un día conoció a Lilián, la imán.

(Aparecen Pillo y Lilián).

Desde aquel momento sintió una irresistible atracción y ya nunca se pudo separar de ella.

Pero…¿Y Cleta?

(Tema musical de Cleta.)

Veréis, estudió la teoría y la práctica de los vientos, aprendió a aprovechar las corrientes de aire y se dedicó a surcar los cielos con sus cintas de colores, porque descubrió que lo que más le gustaba era volar, volar como los pájaros.

(Se ve a Cleta convertida en cometa, volando.)

(Tema musical final ,saludo.)

* FIN *